sábado, octubre 28, 2006

Perfume de Mujer

Pacino... Barrilete Cósmico

Scent of a woman (1992) Dirigida Por Martin Brest, con Al Pacino, Chris O'Donnell, James Rebhorn y Phillip Seymour Hoffman.

(Reseña pedida por José L.K.)

Los grandes actores son como todos los seres humanos: tienen grandes momentos y otros no tanto. Por momentos pueden desilusionar, sobre todo por las esperanzas que nosotros (los espectadores) ponemos en ellos cada vez que pagamos una entrada porque simplemente su rostro esta un poster publicitario. Pero si tenemos la suerte de que nuestra entrada pague el derecho de verlo en uno de sus grandes momentos, la magia del cine aparece, aquella que nos regala esos minutos que quizas nunca olvidaremos en nuestras vidas. Eso es lo que hace "Perfume de Mujer".

Nuestra película en cuestión comienza con el presente de Charlie Simms (Chris O'Donnell, cuando prometía todo), un muchacho de clase baja con gran potencial y mejor corazón que estudia en un secundario high-class de los EE.UU. Corto de dinero, el muchacho encuentra una oportunidad para hacerse del vil metal y pagarse el avion a casa para las fiestas: un trabajo de fin de semana cuidando a un hombre impedido visualmente. De lo que Charlie recien se entera cuando llega a su destino es que este hombre es un amargado y agresivo Teniente Coronel retirado, llamado Frank Slade (un gran Al Pacino), quien cree que ya no tiene nada por lo que vivir. Desde ese mismo momento Charlie comienza una odisea neoyorkina de tres días, haciendo lo que puede para contener al Teniente Coronel.

Como transfondo de la trama aparece el conflicto moral de Charlie
con sus compañeros de escuela (entre los que se encuentra el brillante desde el principio Phillip Seyomur Hoffman): los ha visto llevar a cabo una chiquilinada contra el formalísimo director del instituto (James Rebhorn) y es presionado públicamente por éste para actuar de soplón público, a precio de su futuro.

En este tenso redoble transcurre la trama, donde Martin Brest dibuja la mejor situación para que Pacino explote. Su impecable composición literalmente descolla en la inolvidable escena del tango, no porque Pacino baile bien ni mucho menos, sino porque su presencia y su habilidad actoral domina totalmente la cámara.

"Perfume de Mujer" es una película inolvidable, obligatoria para cualquier amante del cine. Así de fácil.