Desde aqui nuestro pequeño homenaje al hombre que demostro que se puede hacer peliculas geniales para las masas, destripandolas de la turbia soberbia que nunca es necesaria cuando se tienen tantas ideas.
Realmente lo sentimos.
Muchas gracias, Sr. Bielinsky, y hasta siempre.
sábado, julio 01, 2006
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario